• Ten en cuenta que cualquier tipo o nivel de consumo puede ser riesgoso.
• Recuerda siempre que tienes derecho a negarte a consumir una sustancia.
• Considera que hay alternativas al uso de alcohol y otras drogas.
• En fiestas o actividades masivas, nunca pierdas de vista tu vaso.
• Tampoco permitas que te den sustancias o bebidas cuyo origen no conoces.
• Te sugerimos informarte sobre los efectos y riesgos de consumo cada sustancia.
• Si vas a beber alcohol, hazlo de manera lenta y relajada, en lo posible intercalando con agua y consumiendo alimentos.
• Evita mezclar sustancias, ya que esto puede generar reacciones no deseadas y aumentar el riesgo de accidentes.
• Ten en cuenta que el uso de medicamentos y tranquilizantes puede ser peligroso sin supervisión de un especialista.
• Procura mantener hidratación constante, especialmente en lugares calurosos o durante actividades físicas como bailar.
• Las distintas vías de administración pueden condicionar el tiempo e intensidad de los efectos y llevarte a consumir más de lo pensado, lo cual puede generar una intoxicación.
• Evita consumir algunas sustancias si estás deprimido, sufres de ansiedad o estás estresado, ya que el consumo de algunas sustancias puede intensificar o agravar emociones difíciles de manejar.
• Si vas a consumir alcohol o algún tipo de sustancias, ten en cuenta estrategias para tu cuidado y el de las demás personas, por ejemplo: estar acompañado con alguien de confianza, evitar conducir, evitar conductas sexuales de riesgo.
• En caso que tú o alguien en tu entorno se sienta mal después de consumir sustancias, deja de consumir de manera inmediata.
• Si experimentas mareos o baja presión, trata de ser consciente de tu respiración, relájate y busca un lugar tranquilo y bien ventilado.
• Evita estar solo/a. Tampoco dejes solo a una que esté en esta situación.
• Si sientes ganas de vomitar, hazlo. Si es alguien que está con poca conciencia, asegúrate de que sus vías respiratorias estén despejadas.
• Presta atención a algunos signos de intoxicación como: tamaño anormal de las pupilas, tambaleo o marcha inestable, somnolencia, náuseas, vómitos, dificultades respiratorias, agitación, temblores, nerviosismo extremo, convulsiones, fuertes dolores de cabeza o abdomen, confusión y desorientación, dolor en el pecho.
• Frente a estos síntomas no dudes en pedir ayuda, acudir de inmediato a un centro médico o llamar a una ambulancia (131).