Profesionales de SENDA regional en conjunto con funcionarios del Centro de Régimen Cerrado de La Serena realizaron un taller dirigido a jóvenes que han infringido la ley, oportunidad en la que se abordó la temática de las drogas junto con las familias de los internos, quienes participaron activamente de esta instancia, la que busca conocer la realidad del consumo de sustancias y derribar los mitos en torno a ella.

En la oportunidad, los jóvenes escucharon atentamente el testimonio de rehabilitación de Juan Moyano, quien tras enfrentar un largo proceso de consumo, que incluso le significó vivir en situación de calle, hoy está pronto a egresar de la universidad como trabajador social. Juan también se ha desempeñado en centros de rehabilitación, precisamente con jóvenes, lo que le permitió generar una instancia de conversación sincera y directa con los asistentes.

“De todas las veces que he entregado mi experiencia, ésta ha sido una de las más significativas. Les relaté mi experiencia de consumo y cómo es estar arruinado por las drogas, a través de un lenguaje cercano, pero muy directo. Percibí que el grupo estuvo muy atento a mi historia y entendieron todo lo que se pierde por consumir drogas. Espero que el mensaje les permita generar un cambio de mentalidad”, explica Juan Moyano.

Macarena Ibacache, sicóloga y Gestora Territorial de SENDA, destacó la presencia de los padres en esta jornada, “pues estas temáticas no sólo podemos trabajarlas con los adolescentes, sino que deben abordarse a nivel familiar. Tuvimos a un grupo muy entusiasta, lo que nos revela su interés por enfrentar con altura de miras su proceso en el centro”.

¿Es la marihuana menos dañina que otras drogas? Fue una de las interrogantes tratadas en la charla, donde no sólo los jóvenes mostraron sus puntos de vista y opiniones, ya que los padres también entregaron sus impresiones y resolvieron sus dudas en torno a las consecuencias que trae consigo el consumo de sustancias.

Marcela, madre de un interno, reconoce que “este es un beneficio para los jóvenes, ya que ellos no reconocen que son drogaditos, ni tampoco saben el real impacto que tiene en sus vidas el ser adicto. Esto les enseña a cambiar las bases que tienen sobre las drogas, para que cuando salgan puedan enfrentarse a una vida nueva, alejada de las drogas y el alcohol”.

Finalmente, Verónica Zárate, directora regional de SENAME, indicó que “lo que buscamos es abrir un espacio de diálogo y reflexión con los jóvenes y sus familias en torno a la temática del consumo. Sabemos que alrededor de un ochenta por ciento de ellos presenta consumo problemático, por lo tanto es una tarea que debemos realizar de manera conjunta con las familias y con instituciones como SENDA, quienes tienen los conocimientos técnicos y prácticos de cómo enfrentar de mejor manera estos casos”.

 

 

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