Con la asistencia del encargado metropolitano de Prevención de SENDA, Mauricio Benítez, el director de Desarrollo Comunitario de la Municipalidad de Santiago, Andrés Toro, docentes y directores de establecimientos educacionales de la comuna, el equipo profesional de SENDA Previene, se realizó la ceremonia de cierre de los programas Chile Previene en la Escuela y A Tiempo.
En la oportunidad, Benítez destacó la labor de la prevención en el ámbito educacional, que en las comunas del Gran Santiago supera los 1.500 establecimientos, recordando que esta semana se certificaron en habilitación, inicial y avanzado 150 colegios que entregan formación preventiva a 70 mil estudiantes.
“En una sociedad donde el consumo de alcohol y drogas parte tempranamente la herramienta más consistente es la prevención desde la educación básica, de modo que los niños cuenten con factores protectores que les permitan hacer frente a los riesgos del entorno social”, afirmó Benítez.
Agregó que «prevenir es decir no al consumo de drogas lícitas e ilícitas. Es un no con mayúsculas a la legalización de drogas como la marihuana que impactan socialmente a los más pobres con su secuela de destrucción social y familiar. Para SENDA, cuidar, educar, formar, es el norte, de modo que cerramos las puertas a cualquier intento por liberar y masificar las adicciones».
Balance comunal
En la oportunidad, se destacó el trabajo realizado en el programa Chile Previene en la Escuela en los establecimientos República de Haití, Fernando Alessandri Rodríguez, República de Alemania, Saint Henry School, República de Panamá y Santiago de Chile.
Las gestoras a cargo del programa, Carmen Gloria y Carolina Espinoza, dieron cuenta de las principales acciones ejecutadas en el período 2011-2013, exhibiendo imágenes de las actividades en terreno, ferias preventivas, teatro y mimos, así como explicaron las fortalezas y debilidades que detectaron en el desarrollo del trabajo preventivo.
Posteriormente, los profesionales Iván Vásquez y Viviana Vásquez relataron la implementación del Programa a Tiempo indicando que abordaron a 350 estudiantes de 7° y 8° básicos focalizados con criterios de vulnerabilidad, tarea que se desarrolló en los seis establecimiento citados: 4 de ellos partieron en 2012 y 2 este año.
Posteriormente, el tamizaje y las entrevistas en profundidad realizadas por el equipo se abordaron 63 casos, de un total seleccionado de 81 usuarios. El número de niños disminuyó en el tiempo debido a cambios de colegio, ausencias prolongadas o abandono voluntario del estudiante.
Iván Vásquez explicó que en el abordaje de casos es importante estrechar vínculos con los estudiantes para ganarse su confianza lo que posibilita un trabajo más efectivo. En este mismo sentido, resulta de vital importancia, dijo, el proceso de comunicación donde el lenguaje y el campo común de experiencia, juegan un rol determinante en la relación.