Con la presencia de la directora nacional del Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas y Alcohol, SENDA, Francisca Florenzano, y más de 110 invitados, se realizó la entrega simbólica de los cheques destinados a cada uno de los 30 proyectos adjudicados en la región del Bío Bío, para la implementación de programas de prevención universal del consumo de drogas.

La convocatoria, estuvo dirigida a instituciones públicas y privadas sin fines de lucro, y beneficiarán a proyectos pertenecientes a organizaciones de toda la región y de distintos ámbitos relacionados a la prevención.

Para la directora nacional de SENDA, “estar en la Región del Bío Bío, donde 30 organizaciones podrán ejecutar sus proyectos, da significado a nuestra gran premisa de estar en terreno, previniendo en los barrios, en la poblaciones, en los municipios y juntas de vecinos», enfatizó.

Entre las iniciativas a financiar, por casi $30 millones, se encontraban actividades como el mejoramiento o recuperación de espacios públicos; la inversión en equipamiento que promueva la prevención del consumo drogas; desarrollo de actividades preventivas de esparcimiento ciudadano; y la implementación de talleres o ciclos formativos.

Algunos proyectos ganadores fueron “Prevención del Consumo de Drogas y Alcohol a través del Reforzamiento de los Factores Protectores en la comunidad Escolar”, de la Corporación de Estudios, Capacitación y Empleo de la Cámara de la Producción y del Comercio de Concepción ; “Una Comunidad que se Informa y Educa, Se fortalece para Prevenir el Consumo de Drogas”, de la Municipalidad de San Pedro de la Paz; Proyecto “Conjunto Musical Horizonte”, de la Municipalidad de Hualqui; “Adictos a Vivir sin Drogas”, de la Congregación de Religiosos Terciarios Capuchinos de Concepción; “Aumento de Percepción de Riesgo sobre el Consumo de Drogas en Estudiantes de Enseñanza Media de la comuna de Tomé” de la Municipalidad de Tomé;  y “Niños y Jóvenes de San Rosendo por la Prevención de Drogas” de Municipalidad de San Rosendo, entre otros.

El Fondo Especial de Drogas surge a partir de la enajenación de bienes y valores decomisados en el marco de la ley 20.000 de Drogas, así como los dineros que se encuentren en esa situación, y su principal objetivo es contribuir de manera eficiente, a evitar y disminuir el consumo de drogas ilícitas y alcohol, y reducir los daños asociados a dicha práctica, principalmente en sectores de alta vulnerabilidad.

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